Recientemente, la vicepresidenta del investigación de la entidad C-FAM, Susan Yoshihara, ha hecho un llamado alarmante sobre la disminución de nacimientos en Estados Unidos, en parte debido a los problemas económicos que ha atravesado el país en estos últimos años. La tasa de fertilidad ha ido disminuyendo desde la recesión económica del 2008. Sin embargo, aún no se puede comparar con el invierno demográfico que viven varios países de Europa.
La caída viene en gran medida de parte de las mujeres que se encuentran en sus años 20, quienes después de la recesión, no se deciden si deben o no tener un segundo hijo. Las mujeres entre 30 y 40 años no están esperando. Su tasa de fecundidad se ha mantenido sin cambios. Las mujeres de mediados y finales de los 40 está teniendo más niños que antes.
Como se puede observar, la edad en que las mujeres tienen hijos ha ido en aumento durante más de una generación. Aunado a ello despues de la recesión, la inmigración se ha reducido, lo que ha dado lugar a un menor número de nacimientos por inmigrantes, que en el pasado han sido un factor significativo en las tasas de fertilidad de Estados Unidos.